25 mayo 2012

BIODANZA Hay que vivirla!!

"La propuesta es ser quien somos, desplegar nuestra identidad,entrar en conexión con nosotros y los otros.. Ocupar nuestro lugar en el mundo" Rolando Toro


Biodanza es un sistema de integración y encuentro humano que mejora tu calidad de vida, a través de la música, la danza, el movimiento y propuesta de comunicación grupal, activa la expresión de los potenciales genéticos y nos conecta con la alegría de vivir..

¿Cómo lo hacemos?
El taller consiste en una serie de danzas simples,accesibles a todas las personas, donde lo importante es vincularnos, conectarnos con nuestras emociones y la plenitud de la vida, con la alegría de vivir..

Beneficios de la Biodanza
Con la práctica de la biodanza se facilita una transformación progresiva en nuestra calidad de vida, aumentamos nuestra energía vital, disminuimos el estres, reforzamos nuestro sistema inmunológico, nuestra identidad y desplegamos nuestra capacidad de expresión y mejoramos la comunicación afectiva.
No es necesario saber bailar, sólo tenés que ir con ropa cómoda.

Te esperamos en Clínica Integral en 25 de Mayo 108. Tacuarembó. Tel 4632 5225.
Sábados a las 10 hs, frecuencia dos veces por mes.

19 mayo 2012

Educación BIOCÉNTRICA. Taller vivencial.

Nuestro posicionamiento es considerar el acto de Educar como la acción de fomentar a través de  un proceso social,  la actuación del ser humano,  como agente de su propio desarrollo,  tendiente a lograr la más cabal realización de sus potencialidades.
La Educación Biocéntrica, parte de un nuevo paradigma de las Ciencias Humanas: elPrincipio Biocéntrico, donde la educación se organiza en función de la vida.
Plantea que “para 
aprender a vivir es preciso aprender a sentir, amar, acariciar, respetar, proteger, ayudar, compartir, escuchar, desarrollar contenidos vinculados especialmente a vivir bien y a cultivar relaciones afectivas y saludables”.
Así  Rolando Toro, expreso su mirada en la educación: “Mi proyecto personal es muy ambicioso: obtener una nueva generación de niños libres, amados y felices, capaces de tener un nuevo estilo de vida con costumbres de salud y de convivencia. La calidad de vida no viene del éxito social o económico, sino de la conexión profunda con la vida.” Rolando Toro
La Educación Biocéntrica utiliza como mediación el Sistema Biodanza, a través del cual se expresan y desarrollan los potenciales genéticos de vitalidad, sexualidad, creatividad, afectividad y trascendencia que conducen a la alegría de vivir, a la percepción de lo más sutil y esencial, a la expansión de conciencia y  empatía o capacidad de amor infinito.
La Educación Biocéntrica propone el cultivo de dos grandes ámbitos de aprendizaje:
1. El aprendizaje intelectual, de habilidades y conocimientos que desarrollen el pensamiento conceptual. Los niños deben iniciar en la escuela el proceso de aprendizaje cultural, lectura, escritura, aritmética, artes, preparación básica para descubrir los secretos de la naturaleza y penetrar en las disciplinas científicas, tecnológicas y humanísticas.
2. El crecimiento personal que permita la expresión de la identidad y la integración afectiva. Aprender a vivir, a ser feliz y a vincularse afectivamente: Este segundo objetivo está totalmente ausente en la escuela tradicional. No existe un programa para desarrollar la inteligencia afectiva, la identidad.
Estos dos ámbitos deben cultivarse en íntima relación, tanto en el aspecto metodológico como en el de las relaciones humanas.
Nuestra civilización necesita con urgencia un nuevo tipo de ser humano. Los niños deben “aprender a vivir”.
No se trata, por lo tanto, de cultivar sólo el intelecto, sino esencialmente el desarrollo de la afectividad. Para alcanzar este objetivo es necesario que los niños, desde pequeños, aprendan a vivenciar, es decir, a sentir con intensidad aquí y ahora su experiencia con la vida.
La base de la Educación Biocentrica reside en reconocer la afectividad de la inteligencia, ya que posee elementos de conciencia, valores y compromiso, cuyo origen es el vínculo. Rolando Toro lo fundamenta a través de los siguientes relatos:
“En realidad, la inteligencia forma parte de todas nuestras funciones y de nuestra historia existencial. Pensamos no solamente con el cerebro, sino con todo nuestro cuerpo. (…) Pienso que el factor permanente que integra y da estructura a la inteligencia como función global es la afectividad. (…) La Inteligencia Afectiva no es un tipo especial de inteligencia. Todas las formas diferenciadas de inteligencias: motora, espacial, mecánica, semántica, social, etc, tienen una fuente en común: la afectividad.”
“La génesis biológica de la línea de la Afectividad está relacionada en el instinto de solidaridad dentro de la especie a la capacidad de empatía (identificarse con el otro) a los impulsos gregarios, a las tendencias altruistas y a los ritos socializantes. La biología celular demuestra la existencia de verdaderas comunidades de células que integran algunas operaciones bioquímicas de cooperación entre sí. Los sistemas vivos son potentes mecanismos de coherencia en los cuales funcionan los principios de afinidad, de rechazo y en los cuales cada parte se coloca al servicio de la unidad biológica.” (Toro, 2002, p.89)
Sabia y poéticamente Rolando Toro dice en el Encuentro de Biodanza realizado en Carlos Paz, el 19 de agosto de dos mil seis:
“La conciencia ética sale del corazón. No se llega por la exacerbación de la razón, sino por el corazón.”